Julia Margaret Cameron (1815–1879), artista británica considerada como una pionera en el campo de la Fotografía Artística. Nace en Calcuta, India en el seno de una familia culta y educada, sus estudios los realizó principalmente en Francia entre 1818 y 1834, si bien no con un enfoque en lo artístico sí recibió formación académica dentro de los clásicos.

En 1836 se encontraba en el Cabo de Buena Esperanza,  recuperándose de un problema de salud, es aquí donde conoce a dos de las personas que más influyeron en su vida, por un lado a John Herschell (1792 – 1871) con quien compartía charlas sobre el entonces novedoso invento de la Fotografía, y por otro a Charles Hay Cameron (1795 – 1880) con quien intercambiaba ideas sobre sobre estética y filosofía.

Para 1838. contrae nupcias con Charles Cameron en Calcuta, donde residen varios años, familia de filántropos cuya vida social giraba en reuniones con artistas e intelectuales de la época, su amistosa relación con Herschell continuó por años, por lo que Herschell la mantenía informada sobre los avances del novedoso proceso fotográfico.

Para 1848, la familia se muda a Inglaterra, donde Cameron entabla amistad con artistas de la época, sin duda alguna fue el pintor George Frederic Watts (1817 – 1904), practicante del Arte Conceptual quien solía decir “ pinto ideas, no cosas”, con quien intercambió ideas sobre el Arte.

Pese a conocer los principios de la Fotografía más que la mayoría de las personas de la época, Cameron se dedica a la práctica del proceso fotográfico hasta los 48 años de edad, después de que su hija le regalara su primera cámara fotográfica, lo que le indujo a improvisar un estudio y un cuarto oscuro en su casa, para esa época la familia vivía en la Isla de Wight. Al decir de muchos autores, a partir de ese momento, Julia Margaret Cameron se propuso a contribuir para que el proceso fotográfico fuese considerado como una manifestación artística.

Para Cameron, el retrato se convirtió en su género por excelencia, fotografió a gran cantidad de intelectuales de la época y dado su gusto por la literatura,  religión y temas mitológicos le conllevó a incursionar en la representación de escenas que reflejan su fascinación por la espiritualidad y belleza, para tales representaciones utilizó como modelos tanto a familiares como a amigos.

Si bien la gran mayoría de los retratos que realizó de personalidades de la época victoriana (Charles Darwin, Henry Taylor, John Herschell, Lord Tennyson) actualmente son considerados como ejemplos sublimes de retrato artístico, esto no siempre fue el caso.

Junto con estos retratos de intelectuales, Cameron también realizó retratos de jóvenes mujeres, en cuyo caso mostró una mayor libertad de representación, lo cual tampoco fue del agrado de todos.

Uno de sus primeros retratos exitosos es sin duda “Annie, (1864), se trata de un retrato que realizó a Annie Philpot (1857 – 1936). Esta imagen fotográfica es un retrato de una niña con cabello suelto, vistiendo una chaqueta oscura de cuello redondeado, esta fotografía representó para Cameron su primer gran logro, sin embargo, para varios autores esta fotografía presenta falta de foco sobre la cara de la niña, de hecho, una de las características de los retratos de Cameron es el “foco suave”.

Sólo unos meses después de iniciarse en la práctica del proceso fotográfico Cameron comienza a participar en Exposiciones muy importantes, dentro de ellas la décima exposición de la “Photographic Society of London” y una docena de retratos para la exhibición de la “Edinburgh Photographic Society”, lo cual reforzó su auto confianza en su trabajo y le motivó para continuar en su producción fotográfica,  lo cual le conllevó a continuar con exposiciones tales como la “Universal Exposition in Paris” (1867), la “Galería Alemana en Londres” (1868) y recibir reconocimientos tales como el “mérito al buen gusto” en la “Universal Exposition” (1873).

Pese a estas muestras, al decir de algunos autores, el trabajo de Cameron también recibió fuertes críticas, una de las principales por el “foco suave” presente en sus retratos, esta falta de foco fue duramente criticada por ser considerado como una deficiencia técnica, estas críticas no preocupaban a Cameron, y pese a que con los años su foco mejoró un poco (sobre todo después de cambiar de cámara), ella comentaba que se concentraba más en “la belleza y no en la definición”, mientras que la mayoría de los fotógrafos de la época buscaban la perfección técnica del medio.

Y no sólo el foco suave típico de los retratos de Cameron, incluso algunos “errores” de proceso que permitía se reprodujeran en la copia, fue de lo que más se criticó en su trabajo, sin embargo para Cameron estas “deficiencias” aportaban más al “sentir de la imagen”.

Pese a toda esta crítica, los retratos de Cameron son actualmente reconocidos como muestras de “Arte Fotográfico Fino”, que incluso a principios del Siglo XX conformó parte del movimiento “pictorialista”.

Sin duda alguna, Julia Margaret Cameron es una de las fotógrafas pioneras cuyo trabajo más influyó para que la Fotografía fuese considerada como una técnica de expresión artística.

Referencias:

  • Cox, J. Ford, C. (2002) Julia Margaret Cameron: The Complete Photographs. Los Angeles, CA. Getty Publications,
  • Newhall, B. (1984). The History of Photography from 1839 to the present day (5th ed.). New York, NY: Museum of Modern Art.
  • Rosenblum, N. (2015). A history of women photographers (3rd ed.). New York, NY: Artabras.
  • Varios (1979). Historia de la Fotografía. Barcelona: Salvat S.A.