La transacuatipia 
se trata de una técnica alternativa que tiene como finalidad alterar el aspecto de una imagen fotográfica producida por impresión por inyección de tinta, brindándole una connotación de pintura “deslavada”, es una técnica rápida y directa que permite transformar una copia ordinaria en una imagen única con un efecto pictórico.
Algunos autores consideran como autor representativo de esta técnica a Matthew Brandt, fotógrafo y artista visual estadounidense; quien a decir de su enfoque;
“es un poco desordenado y experimental». Brandt produce fotografías a gran escala que recuerdan los orígenes de la fotografía en el siglo XIX, a menudo incorporando la expresión corpórea o materia física del sujeto en sí. Sintonizado con la historia de su medio, y su fisicalidad resuelta, inspirado por las fotografías clásicas de paisajes estadounidenses, Brandt recorre el oeste de Estados Unidos de Norteamérica, fotografiando y recolectando muestras materiales de la naturaleza y las ciudades. Las relaciones recíprocas que Matthew Brandt crea entre sus sujetos y los materiales utilizados para representarlos siempre tienen una base conceptual, a menudo en respuesta a problemas sociales y ambientales. Es profundamente inquisitivo, incluso intrépido, en su exploración de temas, materiales y procesos, lo que al decir de los críticos logra revitalizar el medio de la fotografía con una sensación de asombro.
El proceso es sencillo: primero se imprime una fotografía en papel Bond blanco u hojas blancas para fotocopias y luego se nebuliza con jugo de limón colado, acetona, cloro, o agua, para que la imagen se desvanezca según convenga. Esto se logra ya que la tinta se perfunde en el papel; lo que produce colores desvaídos y una textura acuosa. Sin embargo, los fotógrafos artísticos pueden utilizar la transacuatipia para producir efectos precisos y sutiles a través de un cuidadoso control de la cantidad de líquido y su aplicación.
Proceso de impresión Transacuatipia.
Materiales:
- Una imagen digital.
- Impresora de inyección de tinta.
- Papel Bond u hoja blanca estándar (gramaje entre 80 y 100 g).
- Botella con nebulizador.
- Papel secante.
- Una base de madera o vidrio más grande que el tamaño carta, que no importe que se maltrate. Ésta se usará como base para colocar el papel Bond y poder colocar el líquido que se va a usar.
Preparación de la copia.
- Imprimir la imagen digital en papel Bond u hoja blanca estándar entre 80 y 100 g. (El papel no debe exceder este grosor para evitar que el agua emborrone la tinta en la superficie en lugar de filtrarse).
- Poner la copia boca arriba sobre la madera, vidrio o una hoja de papel secante.
- Humedezca la cara impresa aplicando el líquido de su elección auxiliándose con el nebulizador y vaya comprobando cuanta tinta se filtra a través del papel (esto se puede verificar revisando el reverso de la copia).
- Deje de rociar en la copia cuando la imagen del reverso adquiera la apariencia deseada.
- A continuación, cuelgue la Transacuatipia para que se seque.
Variaciones.
Existen muchas posibilidades de experimentación para este procedimiento, por ejemplo, rociar las copias con alcohol diluido o una solución de blanqueo afecta a los colores de la imagen. El blanqueador aclara los colores; el alcohol hace que fluya y se mezcle. Como precaución se recomienda no mezclar líquidos entre sí.
Referencias:
- Marco, A. y Minniti, S. (2015). Fotografía experimental, manual de técnicas y procesos alternativos., Barcelona: Blume.